No deja de sorprender el cinismo de Rubén Moreira al declarar que Coahuila ha avanzado en el combate a la pobreza extrema, cuando durante 12 años los programas sociales han sido secuestrados para fines electorales. La entrega de los recursos está impregnada de corrupción y no llega a quien verdaderamente más lo necesita. Coahuila solo avanzó un 3% en el combate a la pobreza cuando otras entidades como Aguascalientes, Querétaro y Baja California Sur han disminuido la pobreza un 13%. A nadie engañan las cifras de este informe de gobierno cuando la realidad que se vive en nuestro estado es vergonzoso y lamentable.