El pasado 4 de junio los coahuilenses vivimos una jornada en la que nuestros sueños como sociedad deseaban un cambio en nuestro estado. Estamos hartos de las mentiras, los hurtos y las artimañas que los hermanos Moreira han ocasionado a Coahuila durante los últimos 12 años, por lo que salimos a expresarnos libremente en las urnas para decirles “basta”, pero no fue suficiente. En una jornada de incertidumbre, el Partido Revolucionario Institucional, el Instituto Electoral de Coahuila y todos los organismos del estado, fraguaron, al estilo del viejo y para nada nuevo PRI, la estafa del siglo al robar urnas, amedrentar ciudadanos, no garantizar ni dar certeza a la elección, tumbar el Programa de Resultados Electorales Preliminares y, a fechas posteriores, coartar la decisión de los magistrados de los tribunales Estatal y Federal Electoral para dar una pseudo-legalidad a su ensuciado “triunfo”.
De cara a lo que nos viene en las elecciones de 2018, pero sobre todo a lo que la sociedad espera de quienes gobiernan y dan certeza a ello, lo acontecido el pasado viernes en la Sala Superior del TRIFE, nos deja entrever que el PRI, el Presidente de la República, los hermanos Moreira, Miguel Riquelme y el mismo Tribunal Estatal y Federal desearían acabar con los pocos ciudadanos que aún confían y esperan que el rumbo de nuestra ciudad, estado y país cambien.
Amigos de Coahuila: el próximo viernes 1 de diciembre Miguel Riquelme podrá tomar protesta como Gobernador del estado, pero sepan bien ustedes, él, los priistas y todos los corruptos que se integren a ese equipo, que desde el Poder Legislativo velaremos, tanto yo como mis compañeros diputados de Acción Nacional, para que la transparencia, rendición de cuentas, justicia, igualdad, legalidad y trabajo arduo, sean obligados al Ejecutivo Estatal y sus demás instancias.
El próximo 1 de enero el Congreso del Estado hará historia, ya que la oposición será mayoría entre los 25 diputados que integraremos la LXI Legislatura. Invito a mis compañeros de UDC, MORENA y PRD a que ejerzamos un verdadero contrapeso al Ejecutivo; que exijamos los resultados que los coahuilenses merecemos; que velemos siempre por un trabajo solidario, subsidiario, de bien común y respetuoso a la dignidad de la persona humana que la ciudadanía espera de nosotros.
Desde aquí mi reconocimiento a mi Partido Acción Nacional, de quienes recibí la invitación para participar como candidato a Diputado Local por el distrito IX y del cual comparto, y lo haré siempre, sus principios; a mi amigo Guillermo Anaya, un hombre valiente y entregado que, seguro estoy, desde su trinchera seguirá buscando un mejor estado y con quien decidí emprender una lucha posterior al 4 de Junio a la que bien llamamos “Coahuila Digno”, y que me motiva a ser mejor y trabajar diariamente por el bien común; pero sobre todo a los coahuilenses que depositaron su confianza en mí, a los ciudadanos que se levantan y esfuerzan diariamente por proveer una vida mejor para sus familias, a quienes con principios y valores quieren ser, a diario, la mejor versión de sí mismos.
Hoy, más que nunca, mi compromiso es por mi familia y por Coahuila.
Fernando Izaguirre Valdez
Diputado Local Electo
IX Distrito